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Cómo ser una Mujer Empoderada


¡Hola hermana! Vengo a hablarte de forma directa sin rodeos. Estoy aquí para despertar aquello que desea salir de ti, de tu pecho hacia fuera. Compartiendo pensamientos y, sobre todo, recibiendo códigos e ideas prácticas para transformar tu vida y vivir abundantemente de lo que amas.


Hoy te hablo de tu centro de poder. Ese centro de poder se activa cuando nosotras decidimos, de una vez por todas, vivir la vida como queremos. Nos dejamos de fracesitas de: “La felicidad sólo es para algunos”, “claro para ti es muy fácil, pero yo…”.


Cuando dejamos atrás todas esas creencias limitantes, y realmente observamos la vida, tal y como es, para nosotras también poner soluciones tal y como son, entonces podemos hacer algo diferente para cambiarla. Es decir, cuando tenemos un problema → darle una solución, es ese momento donde tu centro de poder, se activa.


Os vengo a contar que hace unos poquísimos días, hemos tenido el retiro de Astrointuición del Oasis de Kali. Kali es la diosa indú de la destrucción y del renacimiento. Es la que aparece con la lengua afuera y un montón de hachas, espadas y de todo, con muchísimas manos y brazos.


Y la verdad es que no tengo palabras para describir lo que hemos vivido en El Oasis de Kali. Pero lo que sí tengo seguro es que mucha, mucha gente, Muchísima gente ha intentado impedir durante muchos siglos que estas uniones de personas, que estos eventos, que estos acontecimientos no ocurran, por el increíble impacto positivo que tienen en las personas. Es un impacto liberador. Ya lo iréis viendo. Tenemos cada uno de los testimonios de todas las asistentes del Oasis de Kali.


Si tú has venido a este retiro hermana mía Kali, bienvenida porque vamos a hablar de ti. Y si no has venido, también vamos a hablar de ti, porque aunque no estuvieses en ese retiro, quiero contarte unas pequeñas reflexiones sobre lo que ha pasado. Y sobre lo que hemos aprendido.


Tu centro de poder, es aquel que tú te permites vivir y sacar.


En este retiro, hemos tenido mujeres de todo tipo con diferentes estilos de vida, backgrounds, diferentes historias, traumas, situaciones, niveles económicos. Y el poder de verlas haciendo las dinámicas que yo les proponía sin sobreprotegerlas, sin “ay bueno, no vas a poder”, “tú que no puedes, o quizás…” ¡No, no no!


Han sido tratadas todas como iguales. Y ese centro de poder, yo lo he visto salir cada día de ese retiro, sobre todo cuando hemos llegado al culmen de ese retiro, (que no lo puedo adelantar. Ya lo viviréis si venís a nuestros retiros). Pero ese día hubo llanto, lloros desgarradores. Hubo fuerza y sobre todo, hubo PODER.


¿Por qué os cuento esto? Porque muchísimas de ellas, en la preparación que yo guié para que ese ejercicio ocurriera, estuvieron a punto de rendirse y estuvieron a punto de decir “Yo con esto no puedo”. El tema es que yo por un lado no sostuve esa energía de “no puedes”. Pero por otro lado tampoco hubo una energía de “te obligo a”. Porque el poder se escoge libremente.


Si yo les obligo a hacer esa dinámica, no es poder, es una dictadura. Y si yo les digo “no te preocupes, no lo hagas”, “Si no puedes, no lo hagas”. Ahí tampoco las estoy dejando elegir libremente. Porque ellas ya saben que tienen toda la libertad para hacerlo o no. Pero yo no sostuve ninguna de esas dos energías. Ni el “cuidado, no vas a poder” ni el “hazlo, hazlo, o eres una fracasada”. Ninguna de las dos opciones fue la energía que yo utilicé.


La energía que yo utilicé para sostener toda esa energía es la de MI ALPHA. Mi mujer Alpha. Y esa mujer Alpha sacó a la palestra, a todas las mujeres Alphas de la sala. Independientemente de su historia, de sus traumas, de su situación.

TODAS se miraron a la cara como mujeres Alpha.

Y esa mujer Alpha es el centro de poder. Sin ese poder, sin ese “ellas mirarse a ellas mismas como Alphas”, todo lo que ahora, después del retiro, tienen que vivir y sostener en sus vidas, sería insostenible.

Os hablo de ellas como si fuéseis vosotras, porque vosotras también podéis.

Me llena el corazón, porque ahora muchas dicen: "Yo, como Kali. Yo, como Alpha, ahora he tomado esta decisión después del retiro. He cambiado esto que me estaba dañando. He dejado ir esto que me estaba destrozando." Y desde ese centro de poder es desde donde se toman las decisiones necesarias para una vida rica, plena y en armonía. Que no feliz. La felicidad son momentos, son picos, es una emoción. Pero una vida PLENA y rica en todos los sentidos, es el objetivo que yo he estado persiguiendo toda mi vida. Hasta que dije:


“No voy a perseguir más ese objetivo, voy a SER la Alpha de mi vida.

Y voy a ser MI CENTRO DE PODER”.



Así que, si no has podido venir al Oasis de Kali en esta primera edición y todo esto te resuena, quiero invitarte al programa de De Alpha a Alpha, donde YO, todos los meses me pongo contigo cara a cara, para que saques y vivas desde tu Alpha, desde tu Kali. Desde tu poder.


INSCRIPCIONES ABIERTAS




Yo no te puedo decir que en 5 días vas a recuperar tu poder, porque no es así, es un proceso. Y ese proceso es el que yo seguí y os lo he puesto en ocho fases, para que al acabar ese programa y durante ese programa, cambies la perspectiva que tienes de ti misma, ¡No porque esté mal! SINO porque vas a transformar la opinión que tienes de ti misma. Y desde ese poder, transformar lo que tanto te toca las narices, lo que tanto te disgusta, lo que menos te gusta de tu realidad. Porque es desde el poder, desde donde se toman las decisiones que realmente transforman nuestra existencia.


Así que, hermana, BIENVENIDA a la toma de TU PODER.


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